Nunca dejan de sorprendernos las quintas portuguesas. Preciosas viviendas decoradas de forma mas o menos ostentosas y vinculadas a un gran terreno y una bodega. Parecía que un lugar como este tuviese un acceso complicado, pero nada mas lejos de la realidad. Entramos sin ningún problema.
Resulta un lugar tranquilo para moverse sin ser vistos y aunque no es muy grande si es bastante impresionante.
La parte de la bodega no ofrece gran cosa, los edificios de alrededor tampoco, tan solo son almacenes donde apilar trastos sin interés, así que vamos directos al grano entrando a la vivienda y buscando las bonitas salas ornamentadas que conocíamos de antemano.
Destacan sobre todo el recibidor y un gran salón en la primera planta, así como alguna habitación con techos de madera. El gran salón es de un carácter mas sobrio si lo comparamos con el recibidor. Esta decorado con gran variedad de molduras en paredes y techos y algunos pequeños frescos de ángeles y flores. Lo mas llamativo son sin duda los grandes espejos repartidos de forma par por las paredes de la sala que le confieren un aire de gran amplitud.
El pequeño pero recargado recibidor es sin duda el mayor reclamo para nosotros y nos lleva algún tiempo ver todos sus detalles. Para empezar tenemos una sencilla pero bonita escalera de madera que comunica con la primera planta rodeada por columnas que forman un arco.
Encontramos molduras de escayola pintada en el techo y las paredes y grandes frescos franqueados por columnas embebidas y de base color negro, rematadas con figuras humanas, a su vez decoradas con una especie de guirnaldas de flores y espigas de trigo.
Como no podía ser de otro modo los frescos representan escenas relacionadas con la agricultura y la recolección de la uva.
A parte de la entrada principal la sala cuenta don dos puertas de madera y vidrio rojo que comunican con los pasillos de la planta baja.
El resto de habitaciones no ofrecían realmente nada interesante salvo algunos detalles. Una vez que mis compañeros terminan de recoger y van hacia la salida, con la mini cámara de vídeo grabo un pequeño recorrido por las estancias principales que os dejo a continuación.
Hora de ponerse en marcha. aun nos quedan muchos lugares que ver y descubrir junto a nuestros compañeros.